En 2008 el Ayuntamiento de Madrid y el Átlético de Madrid firmaron un acuerdo por el que el club se trasladaría al antiguo estadio de La Peineta, en cuyos terrenos se construiría un nuevo campo. A cambio de esta parcela municipal, el Atlético derribaría el estadio Vicente Calderón y su suelo serviría para soterrar la M-30 a su paso por el recinto y construir viviendas.

No sería hasta noviembre de 2011 cuando comenzara a desmantelarse “La Peineta”, aunque ya en el mes de marzo de ese mismo año FCC había iniciado las labores previas de preparación del terreno y habían comenzado a realizarse los estudios geotécnicos del suelo.

La idea inicial era que el nuevo estadio madrileño formara parte de las instalaciones de la Candidatura de Madrid a los Juegos Olímpicos de 2020. Sin embargo, al quedar descartada dicha candidatura el diseño inicial del estadio con una pista de atletismo quedó desechado en favor del diseño actual con más gradas.

Esta impresionante obra de ingeniería civil fue llevada a cabo por la constructora FCC, en colaboración con Alquiaga como empresa principal de suministros industriales en obra. Las tareas de edificación fueron lentas hasta que la candidatura de Madrid para las Olimpiadas de 2020 fue derrotada. A partir de ese momento, la obra avanzó a buen ritmo.

Finalmente, el 16 de septiembre de 2017 el Atlético de Madrid pudo inaugurar oficialmente su nuevo estadio, bautizado como Wanda Metropolitano. Para celebrarlo se disputó un partido entre el Atlético- Málaga C.F. (1-0) y contó con la presencia del Rey Felipe VI y 62.906 aficionados más.